con origen en el parque natural de las tablas de daimiel, estas piezas de carácter modular se deslizan por el río guadiana, extrayendo muestras para investigaciones y exponiendo su trabajo y el funcionamiento de los parques al público visitante.

una vez los módulos han sido montados sobre el río, el único acceso se produce por lanchas motoras cuando el nivel del agua es alto. cuando el área se seca, como ocurre en daimiel, los módulos se posan sobre el terreno, apoyados en los mismos flotadores que los mantenían antes sobre el agua.

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el proyecto se desarrolla con especial interés por el ciclo de vida de los materiales, buscando el mínimo impacto ambiental y la autosuficiencia energética en el período de vida útil. priman las estrategias pasivas como el aprovechamiento del calor de la luz natural para depurar agua, un patio interior de refrigeración por ventilación, o un pequeño huerto en cubierta.